El gobierno de Estados Unidos ha anunciado una nueva política que requerirá a los solicitantes de visas de estudiante o intercambio (F, M y J) mantener sus perfiles de redes sociales en modo público, como condición para evaluar sus antecedentes. Esta medida, presentada como un refuerzo en los procesos de verificación, autoriza a los funcionarios consulares a revisar publicaciones y buscar “indicios de hostilidad” hacia los valores y principios estadounidenses.
Tener las redes en modo privado podría ser interpretado como un intento de ocultar información relevante. La decisión llega tras la suspensión temporal de citas para solicitar estas visas, que ahora podrán reanudarse tras la entrada en vigor de las nuevas directrices.
En el marco de su política migratoria restrictiva, la administración Trump ha cancelado miles de visas, incluyendo las de estudiantes extranjeros que participaron en protestas propalestinas. Universidades como Harvard también han sido blanco de acusaciones de antisemitismo, y enfrentan severas sanciones, como la posible pérdida de fondos federales y la prohibición de recibir estudiantes internacionales.
Esta medida representa un nuevo filtro ideológico bajo el pretexto de la seguridad, que podría afectar gravemente la libertad de expresión y el acceso equitativo a la educación internacional.
Cortesia de T44 washington D.C.
