La Iglesia Aposento Alto, ubicada en la colonia El Pedregal de Tegucigalpa, enfrenta una profunda crisis institucional que ha culminado en un inminente desalojo programado para este martes.
Desde el fallecimiento del pastor Luis Alberto Cálic en 2021, la congregación ha sufrido disputas internas relacionadas con el liderazgo y la administración de la iglesia. En 2022, Lastenia, viuda de Cálic, asumió el cargo de pastora interina. Sin embargo, su gestión fue cuestionada por las Asambleas de Dios, que decidieron destituirla debido a desacuerdos relacionados con la administración financiera y la falta de transparencia en la rendición de cuentas.
La falta de consenso entre las autoridades eclesiásticas y la comunidad ha dificultado la búsqueda de una solución que garantice la estabilidad institucional de la iglesia y el bienestar espiritual de sus feligreses.
En el lugar, miembros de la congregación han calificado el desalojo como una “estafa ideológica” promovida por las Asambleas de Dios, argumentando que persiste una disputa sobre la gestión y el liderazgo adecuado de la iglesia.
Cortesia de HCH