¿Debe la fe involucrarse en la política? El ejemplo de Jesús y los primeros cristianos
En el escenario mundial actual, muchos creyentes se alinean con partidos políticos, apoyan candidatos o incluso se postulan a cargos públicos en nombre de sus convicciones religiosas. Algunos gobiernos incorporan religiones oficiales como parte de su identidad nacional. Pero, ante este cruce entre política y fe, surge una pregunta fundamental: ¿Qué postura tomó Jesús? ¿Y qué ejemplo dejaron sus primeros seguidores?
Jesús y su postura frente a la política
A lo largo de los evangelios, Jesús se mantuvo alejado de los asuntos políticos. Nunca buscó poder, influencia sobre gobiernos humanos ni legitimación popular como líder político. Incluso cuando fue presionado para asumir ese rol, se retiró:
“Jesús, que sabía que estaban a punto de venir para llevárselo a la fuerza y hacerlo rey, se retiró otra vez a la montaña, él solo” (Juan 6:15).
Rechazó una oferta de dominio político hecha por el Diablo (Mateo 4:8-10) y evitó pronunciarse en debates fiscales o partidarios. Su respuesta ante el conflicto de impuestos con Roma fue clara:
“Páguenle a César lo que es de César, pero a Dios lo que es de Dios” (Marcos 12:17).
Jesús promovió un gobierno celestial —el Reino de Dios— convencido de que solo ese Reino realizaría el propósito divino para la humanidad (Lucas 4:43; Mateo 6:10).
Los cristianos del primer siglo: fe sin partido
Los discípulos mantuvieron ese mismo principio. Siguieron a Cristo evitando toda implicación política, enfocándose exclusivamente en predicar las buenas noticias del Reino (Mateo 28:18-20). Aunque respetaban las autoridades civiles y cumplían con sus deberes legales (Hechos 5:29; Romanos 13:1, 7), su fidelidad estaba primero con Dios.
Los historiadores confirman esta neutralidad:
Fuente | Testimonio |
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Heckel y Sigman | “Los cristianos se negaban a ocupar puestos políticos” |
Will Durant | “Para un cristiano, su religión era algo superior a la sociedad política” |
Doug Bandow | “Los primeros cristianos no creían que debían intervenir en política” |
Latourette | “A un magistrado cívico se le exigía renunciar si quería ser cristiano” |
Cristianos hoy: neutralidad activa
Basados en el ejemplo de Jesús y sus discípulos, los testigos de Jehová y otros creyentes se abstienen de participar en política, incluso cuando sus valores estén en juego. Prefieren centrarse en su misión: predicar el mensaje bíblico del Reino de Dios (Mateo 24:14).
Este enfoque no implica indiferencia. Es una expresión consciente de fidelidad a Cristo, que sitúa lo espiritual por encima de lo temporal.
¿Fe y política pueden coexistir sin contaminarse?
La historia bíblica y los primeros cristianos proponen una neutralidad ética, más que pasiva. ¿Es esta perspectiva aplicable en los escenarios democráticos actuales? La pregunta queda abierta.